martes, 29 de mayo de 2012

La revolución industrial en Inglaterra

  Inglaterra es la cuna de la revolución industrial; es el primer país donde se da y el lugar donde más se desarrolla, en el siglo XIX. Para Inglaterra la revolución industrial significa un momento de crecimiento económico y de aumento de la productividad.
     El decenio decisivo es el de 1780 en el que hay un crecimiento sostenido y sin marcha atrás. En sentido estricto este es el momento de la revolución industrial. Este crecimiento no se detendrá hasta la década de 1850.
     Durante el periodo de la revolución industrial se difunden las nuevas tecnologías, tanto en el sistema productivo como en los transportes. Se racionaliza la producción manufacturera. Se hacen importantes progresos en la producción agrícola, y en la extensión de la red comercial, mejorando las infraestructuras. Y, también, se hacen avances en el desarrollo del sector financiero.
     Una de las condiciones para el desarrollo de la revolución industrial es el crecimiento del mercado, ya que debe existir un mercado que consuma los productos industriales. Este aumento del mercado se debe, por un lado, al incremento de las necesidades, y por otro, al desarrollo de la población. La población está permanentemente aumentando desde la década de 1780; en el proceso que se conoce como transición demográfica. Gracias a este incremento de la población aumenta el mercado interior, que será la base del impulso de la revolución industrial.
     Además de aumentar el mercado, el crecimiento de la población supone la creación de una fuerza de trabajo barata, debido a su abundancia, aunque no es esta la causa del paro.
     El comienzo de la transición demográfica es posible gracias al progreso coyuntural de las condiciones de vida de la población. Se mejora la alimentación gracias a los nuevos alimentos venidos de América, como la patata, el tomate y el maíz. Además, a esta mejoría de la alimentación se suma al sostenimiento de la tasa de natalidad, y como la mortalidad disminuye, debido al fin de las crisis de alimentación, a los avances médicos y al descenso de la morbilidad de las enfermedades contagiosas y las epidemias catastróficas, la población aumenta. Por otro lado, la fecundidad se adelanta, ya que los hombres y las mujeres no están sujetos a los ciclos de producción campesina y pueden casarse antes, al asegurarse los ingresos gracias al trabajo en la fábrica. Cambia el modelo de matrimonio europeo. Este aumento de la población supone su rejuvenecimiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario